martes, febrero 20, 2007
Crónica de una dimisión anunciada (pero no confirmada, todavía)
La que sigue es la crónica de una dimisión (la de Capello) que no se ha confirmado y cuyo anuncio puede demorarse en función del Madrid-Bayern de esta noche e incluso de sucesivos resultados. Pero la cronología de estos veinte días de febrero revela un camino inequívoco hacia la ruptura, camino en el que algunos medios de comunicación madrileños se han posicionado como auténticas 'fuerzas vivas' del club, dispuestos a acabar con el entrenador italiano a cualquier precio ya que no han podido (de momento) hacerlo con el presidente.
El primer día de febrero se conoce la sentencia judicial favorable a Ramón Calderón en el asunto del voto por correo. El presidente cree que la paz ha llegado al Madrid, pero apenas tres días después lo que debía ser un baño de multitudes se convierte en una pañolada memorable que invade el Bernabéu tras la victoria del Levante. La directiva tarda apenas 24 horas en ratificar a Fabio Capello, lo que se ejecuta a través de Pedja Mijatovic.
Como peaje a esta ratificación, la dirección deportiva exige el retorno de David Beckham y la modificación del estilo de juego, apartando a jugadores veteranos en favor de los más jóvenes. A la primera oportunidad, Beckham regresa al equipo y logra un tanto decisivo en Anoeta, pero Capello no acepta la segunda parte de la propuesta y se niega a vetar a Emerson, Raúl, Guti y Reyes, lo que supone el definitivo desencanto de Mijatovic, el último apoyo que le quedaba al técnico italiano. Calderón, en paralelo, recibe la bendición social ya que Villar Mir decide no impugnar la decisión judicial sobre el voto por correo.
A media semana, la 'Operación Michel' adquiere toda su dimensión. Primero con su exaltación pública en el Foro Ferrándiz, bien arropado por el propio Calderón e incluso por Mijatovic, quien a estas alturas ya ha roto su idilio con Capello, acompañados por corífeos que ensalzan al entrenador del Madrid B. Un día después, la web del club presenta un panegírico fenomenal sobre el 'proyecto Michel' en el que "todos alaban el proyecto de la fábrica".
El sábado, el Betis provoca una nueva bronca en el estadio blanco y el domingo arrecian los ataques al técnico con una ferocidad descomunal. Desde el club se enciende el ventilador y en plena jornada dominical filtra datos sobre el contrato de Capello y el coste de su indemnización. A la misma hora, Ottmar Hitzfeld explica, naïf e inocente, que sólo será entrenador del Bayern hasta el mes de junio y que Bernd Schuster es el candidato ideal para sucederle, con lo que el Madrid deberá darse prisa si quiere al técnico del Getafe la próxima temporada.
A primera hora del lunes, en la fría Valdebebas, Mijatovic reitera a Capello la ejecución inmediata contra el Bayern de los cambios propuestos en el equipo (dentro Gago, Higuaín y De la Red; fuera Emerson, Raúl y Reyes), lo que provoca la réplica del entrenador ofreciéndose a rescindir el contrato tras el partido de hoy, previo acuerdo económico. La base de discusión se concreta en 10 de los 16 millones de euros contratados por las tres temporadas. Capello se presenta a la rueda de prensa oficial de la Champions con el ceño más fruncido de lo habitual y se muestra seco y parco, apenas seis minutos ante los medios, suficientes para dejar en el aire que Cassano vuelve, quizás con otro técnico...
A mediodía, Mijatovic comunica a Calderón y afines que Capello está dispuesto a dimitir el miércoles, información que es filtrada a la "Cadena Cope" poco después. Abierto el melón, la directiva blanca reunida de forma ordinaria manifiesta no darse por enterada de la noticia, eufemismo que pretende oculta los hechos ocurridos, y apunta interrogantes sobre el ocupante del banquillo blanco en el derby del sábado. Y en eso que llega el peor Bayern de la década y el resultado de esta noche será el que decidirá si la dimisión es mañana o si la agonía continúa prolongándose mientras se discute sobre finiquitos y la prensa de Madrid sigue quitando y poniendo reyes.
El Chelsea cambia de nuevo su césped
Como cada invierno, el Chelsea se ve obligado a cambiar todo el césped de Stamford Bridge. No es una ninguna maniobra contra el Barça, como tantas veces se creyó, sino la falta de sol y problemas de drenaje en las instalaciones:
Fotos: Real Madrid.com - AFP - EFE - As.