miércoles, junio 07, 2006

Un gran campeón no se mide sólo por las victorias, sino también por los valores

Música | The Sporting Life
# The Decemberists



La educación recibida se refleja en los comportamientos del deportista. No se trata de haber nacido rico o pobre, acomodado o necesitado, pues nada de ello se elige. Se trata de si el deportista ha tenido la fortuna de recibir una buena educación, o incluso mejor expresado, una buena formación. El comportamiento no depende exclusivamente de esa educación, pero se ve muy influida por ella aunque también por la voluntad personal de asimilar las experiencias (buenas y malas), digerirlas e incorporarlas a la propia actitud. La formación de un deportista es parte esencial de su destino.

Unas líneas más abajo he colgado el vídeo que la cadena Cuatro emitió el lunes sobre el Mundialito indoor de fútbol veterano. Se trata de una pachanga amistosa, sin ninguna trascendencia deportiva ni mediática, apenas la reunión de viejos conocidos (grandes futbolistas) para jugar unos partidillos de fútbol sala. Pero en él se observa a un Maradona sobreexcitado, desencajado, tremendamente fuera de sí por una derrota, quien sabe si merecida o injusta, qué mas da. Es un pésimo ejemplo, una nefasta imagen, otra más, de un futbolista fantástico, quizás el mejor, el de mayor talento natural, protagonista de grandes gestas balompédicas, pero también de un viaje a los infiernos del ser humano del que celebramos su regreso.

No publico el vídeo para criticar a Maradona, pues bastante carga tiene ya al haber emprendido ese largo viaje infernal del que afortunadamente ha vuelto. Lo hago como ejemplo de una mala educación deportiva, de lo que no debe ser un deportista ni siquiera cuando disputa una pachanga entre veteranos. No se trata de ser perfectos, ni siquiera de parecerlo, pues nadie está libre de una rabieta, de un exabrupto, de una derrota mal encajada (o de una victoria fatal llevada). Se trata de asumir que cuanto más gigantesco es un campeón mayor efecto producen sus acciones. Mayor es su responsabilidad. No se trata sólo de luchar y ganar, sino de luchar con las armas correctas y ganar con sabiduría.

Contaba hace pocos días Rafa Nadal que jamás ha lanzado una raqueta contra el suelo porque su entrenador (y tío) nunca se lo habría permitido. Que aún siendo niño le habría echado a patadas de la pista si hubiese cometido esa acción enrabietada. Y que todavía hoy se contiene en los momentos malos o injustos porque la formación que le dio su entrenador así se lo instruye. Es el mismo Nadal que acumula victorias sin freno el que hace detener un partido para ayudar al recogepelotas que sangra por la nariz ante la indiferencia general. El mismo jugador en la victoria que en la derrota: humilde, sereno, trabajador. Absolutamente admirable más allá de su palmarés.

Confieso que la tristeza que me provoca la errática vida de Maradona se ve ahora compensada en parte por su feliz recuperación, pero me irrita verle desaforado y levantisco pudiendo ser un mito viviente que reparte ejemplos y valores a tantos chicos que querrían jugar como él. Chicos que deben aprender a honrar al contrario, aceptar las derrotas como una circunstancia más del deporte y no cual tragedia griega, respetar las reglas sin trampearlas. Chicos que deben aprender a mostrarse serenos en la victoria y honorables en la derrota. Que han de comprender que el deporte es mucho más que un resultado, unos aplausos y muchos elogios, pues sobre todo es una escuela, unos valores y una forma de ser. Que el deporte posee una dimensión ética descomunal y sus campeones son, ante todo, referentes morales. Por todo ello Rafa Nadal es un ejemplo universal y Maradona no.

Vídeo: La rabieta de Maradona en un partido de veteranos (Cuatro TV).

MUNDIAL



Baja muy importante para Italia: Gennaro Gatusso sufre una elongación muscular en el cuádriceps derecho y no podrá jugar los dos primeros partidos de Italia frente a Ghana y Estados Unidos. Como mínimo necesitará dos semanas de recuperación. Son los primeros partidos que Gatusso se pierde por lesión en los dos últimos años. Pese a ello, seguirá en Alemania a la espera de recuperarse. En el equipo titular le sustituirá Perrotta. Ya sabemos que tampoco estará Zambrotta y quizás tampoco Nesta. En la República Checa puede ser baja para el debut su goleador Milan Baros. En Holanda se han recuperado Van der Vaart, Gio y Jaliens, pero son muy dudosos Sneijder y Cocu. Wayne Rooney está pasando la resonancia magnética decisiva para saber si estará en el Mundial.

Fotos: EFE - AFP - ABC - AP.