Música | Chelsea Girl
# Ride
Sólo un regalo de la Juve al Milan puede impedir que dentro de dos semanas se produzca un hecho clarificador del fútbol actual: el campeón en la seis principales ligas europeas será el mismo que en la temporada anterior. No tengo herramientas estadísticas para afirmar con seguridad que estamos ante una circunstancia histórica, pero todo apunta que es así. Los títulos de las ligas de España, Inglaterra, Alemania, Italia (si se confirma la Juve), Francia y Holanda son para los mismos equipos que ganaron las 2004-2005, lo que confirma el dominio de los líderes e incluso, en cinco de los seis casos, el dominio aplastante.
PSV Eindhoven, Olympique de Lyon y Chelsea ya son matemáticamente campeones. Bayern y Barça pueden serlo mañana. La Juve deberá esperar al domingo o quizás otra semana más. Todos ellos han controlado el ritmo de la competición, su desarrollo, los momentos trascendentales y también el modo de combinar los partidos nacionales con los de Champions, en lo que incluso varios de ellos se han enfrentado y eliminado: el PSV cayó ante el OL y el Chelsea con el Barça, en tanto Bayern y Olympique lo hicieron consecutivamente frente al Milan, finalmente derrotado por el Barça. Sólo la Juve siguió otros caminos, para acabar cayendo ante Arsenal.
A falta de concluir la mayoría de campeonatos ya podemos citar algunos datos interesantes. El campeón que acumula menos derrotas es la Juve, con sólo una (3-1 ante Milan), pero diez empates, la mayor parte sufridos en los dos últimos meses. Si la Juve tropieza finalmente y el ‘scudetto’ fuese para el Milan, la estadística sería muy distinta pues el equipo de Ancelotti acumula nada menos que seis derrotas en el campeonato. Los datos del resto de campeones son muy homogéneos: dos derrotas para el PSV (pero sólo 34 partidos), tres para Olympique, Chelsea y Bayern (también 34 partidos de Bundesliga) y cuatro derrotas para Barça.
Quizás lo más relevante de este segundo título consecutivo en los seis países sea analizar si estamos ante un fenómeno sostenible y duradero y la primera impresión es que sí, pues salvo la muy disputada liga italiana en la que Juve y Milan se alternan los títulos desde 2001, en las restantes cinco los actuales campeones no sólo parecen tener mejores equipos, sino también una notable ventaja en la planificación de la próxima temporada. El esqueleto de sus equipos está perfectamente estructurado y sólo deben efectuar pequeños retoques con los que seguir manteniendo su liderazgo. La mayoría de sus principales rivales, en todos los países, no pueden decir lo mismo.
Fotos: El Chelsea celebra su segunda Premier consecutiva (Chelseafc.com); Ronaldinho (EFE); Ballack y Tiago (AP).