miércoles, mayo 10, 2006
Boro o el ‘día de la marmota’
He ahí un equipo que cree en sí mismo. Si dudan de ello, lean lo siguiente.
Es un equipo capaz de eliminar consecutivamente a dos poderosos como el Stuttgart y la Roma por el valor doble de los goles en campo contrario y con idéntico resultado final (2-2). Pero llegamos a cuartos de final y este equipo se enfrenta al discreto Basilea. Pierde la ida en Suiza por 2-0 y a los 24 minutos de la vuelta, el Basilea logra marcar su tercer tanto. Queda poco más de una hora de eliminatoria y cualquier otro habría arrojado ya la toalla porque un 0-3 es tela marinera. Pero el Boro es mucho Boro. Steve McClaren toca el cornetín y allá que va el Séptimo de Caballería del norte de Inglaterra. A los 33 minutos (recuerden ese minuto) el australiano Viduka abre el marcador para los locales (a los 53’ repite gol). A falta de once minutos para la campana, el holandés Jimmy Floyd Hasselbaink consigue el 3-3, pero no basta. Y hete ahí que aparece Massimo Maccarone, el calvo italiano especialista del ‘last minute’, para salvar al Boro en el minuto 90: 4-3 y a semifinales. Calificativos de heroicidad para arriba. Irrepetible, dicen.
Pues sólo han transcurrido 21 días y como si se tratara del día de la marmota, el Boro está perdiendo 0-3 en semifinales de la UEFA ante el Steaua. El reloj marca exactamente el minuto 24 del partido de vuelta. Y exactamente a los 33 surge Maccarone para empezar a darle alas al corneta inglés. Y luego aparecen Viduka y Riggott para empatar a tres. Pero falta un gol para alcanzar la final soñada. Desde el lesionado Mendieta hasta el veterano Southgate, miles de ‘boros’ agitan los puños pidiendo más punch a sus boxeadores. Porque han de saber, antes de continuar, que el Boro está formado por boxeadores del fútbol, por hombres con una terrible pegada, por noqueadores del área. Quizás no pueden presumir de gran estilo y buena técnica, pero sus golpes son demoledores. Bien. Queda menos de un minuto para suene la campana y ¿quién aparece de cabeza, volando a ras de suelo? Maccarone, por supuesto, y a la final. Otra vez 4-3. La misma historia, los mismos protagonistas, idénticos minutos.
El Boro ha vivido una temporada ‘montaña rusa’. Finalista en la UEFA, semifinalista en la Copa inglesa, pero apenas decimocuarto en la liga, con menos de la mitad de los puntos que el Chelsea. Veteranos ya anochecidos conviven con una docena de chavales menores de veinte años y un portero de cristal. Su entrenador abandona el club por la selección y es el único equipo de la Premier capaz de alinear once ingleses en un partido. Hará bien el Sevilla en desconfiar de los minutos 33 y 90. Y en secar bien a Hasselbaink, Viduka y sobre todo al calvo Maccarone en el último minuto.
Vídeos:
Cuatro goles al Steaua en menos de una hora.
EL golazo de Antonio Puerta en la prórroga.
Fotos: Maccarone, logrando el cuarto gol ante Steaua (Getty); Hasselbaink celebrando uno de sus tantos; el veterano capitán Southgate (Getty); y el poderoso tanque Viduka (Getty).