Música | The Blues Still Are Blue
# Belle and Sebastian
En el último cuarto de siglo sólo el Milan de Sacchi ha logrado dos títulos consecutivos de la Copa de Europa (1989 y 1990, con gol de Rijkaard). El resto de grandes equipos europeos ha fracasado en el intento de acumular dos triunfos seguidos desde que en 1980 el Nottingham Forest consiguiera encadenar dos victorias sucesivas en las finales frente a Malmoe y Hamburgo. El Milan de Sacchi, Van Basten, Gullit et altri es la única excepción a esta regla no escrita pero irrompible. Grandes equipos europeos se han estrellado frente a ese muro: desde el Dream Team de Cruyff al Madrid galáctico, pasando por la Juve de Zidane, el Bayern de Kahn, el Milan de Shevchenko o el Manchester de Beckham.
Soy consciente que catalogar a estas alturas a cualquier equipo como favorito de una competición que ni siquiera se ha sorteado suena a frivolidad y pido disculpas por hacerlo. No puede haber ningún favorito para una competición cuya final se celebrará dentro de un año en Atenas. Pero de entre los participantes destaca poderosamente el Chelsea por dos razones: sus excelentes fichajes y el hambre de gloria que arrastran su técnico y jugadores.
Desde hace dos meses y mientras Barça, Arsenal o Milan centraban sus esfuerzos en pelear por la Champions, Mourinho, Kenyon y Abramovich han adelantado su particular competición en busca del triunfo en la próxima edición. Para ellos, la Premier es un sueño ya amortizado y la única cuenta pendiente es la europea. En el historial reciente hay dos heridas sangrantes: las eliminaciones a pies de Liverpool y Barça. Terry, Lampard y Mourinho son gente ambiciosa, luchadora, terriblemente terca. Han caído dos veces con el estrépito abrumador que aturde a los gigantes y todos los síntomas apuntan en la dirección de estar preparando un equipo fantástico con el objetivo puesto en Atenas 2007. Sólo así puede comprenderse el fichaje millonario de Shevchenko tras la incorporación de Michael Ballack y también la ‘operación renove’ que tiene previsto cambiar excedentes por especialistas.
¿Tendrá rival este Chelsea monstruoso en la Champions? Indiscutiblemente, sí. De entrada, el Barça de Ronaldinho, campeón del encanto y la estética y este año también de la solidez defensiva y la eficacia. Pero habrá otros grandes candidatos: el Milan de Kaká; el Olympique Lyon de Juninho; el Arsenal de Henry; el Manchester de Rooney y algún otro si se refuerza convenientemente (Madrid, Liverpool, Inter, quién sabe si Bayern de Munich). La Champions es una competición compleja y laberíntica en la que pocas veces triunfa el favorito porque su camino está plagado de trampas. De ahí que podamos decir hoy que el Chelsea es el favorito, pero también que por delante tiene un endiablado jardín que cruzar...
Referencias
- Un 'doblete' en 25 años
Vídeo del entrenamiento de Brasil:
Juninho Pernambucano ensaya los lanzamientos de falta con una efectividad pasmosa (gentileza de PedroCab).
Fotos: Chelsea.com; AP; EFE.