Ronaldo está suficientemente recuperado para entrenarse. Pero, ¿está en condiciones de jugar? Ayer cojeaba claramente en todos los ejercicios en los que sometió a su tobillo izquierdo a una mínima presión. No le molesta cuando corre suavemente y en los tres días que restan para el partido podrá correr prácticamente al máximo nivel. También chuta ya con ese pie, aunque podría prescindir de hacerlo ya que es el “pie malo” (que en Ronaldo es excepcional). Los problemas surgen cuando somete el tobillo a tensiones, saltos o rotaciones. Es entonces cuando el ligamento tibio peroneal anterior que se lesionó hace un mes vuelve a protestar. (Por cierto, siempre se habla de “rotura de ligamentos”, pero en realidad se trata de elongaciones, de estiramientos máximos y excesivos de los ligamentos, que no llegan a romperse como tal).
Si la recuperación continúa como lo ha hecho desde el pasado 15 de octubre, Ronaldo podrá alinearse el sábado. Podrá ser decisivo y precisará una vigilancia especial, pues su olfato goleador es temible. Y podrá marcar, lo que entra dentro de lo muy probable. Pero también arriesgará mucho. Su tobillo está curado, pero no en perfectas condiciones. Ahora mismo no puede realizar un ‘sprint’, frenarse en seco, girar sobre ese pie izquierdo, saltar, caer otra vez sobre dicho tobillo y arrancar de nuevo en carrera. Por tanto, el sábado correrá un riesgo elevado por defender a su equipo. Aplaudo que esté dispuesto a jugarse el pie por su club y, además, por razones psicológicas obvias puede ser una de las claves del partido. Pero que lo sea y que marque no significa que no esté arriesgando una recaída, una lesión más grave o quien sabe si buena parte de la temporada. Por supuesto, se arriesgará.
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P.S.: Les recomiendo el análisis estadístico que sobre el Madrid-Barça ha efectuado "El ojo que todo lo ve".