sábado, octubre 15, 2011

Luciérnagas con botas


1.- Sin mediocentro y con Messi de extremo derecho. Con un bajito en el puesto del 4, como en los viejos tiempos; y con Leo por banda, como en los tiempos de Rijkaard. Con dos defensas, aunque en la alineación aparentaban ser cuatro. En realidad, el 90% del partido ha sido un 2-3-3-2 combinado con un 2-3-2-3. Cuando quiere protegerse, Guardiola sale con tres defensas. Cuando ni siquiera eso, sale con cuatro que se transforman en dos al pitido inicial.

2.- No todos los partidos permitirán eso y volverá el mediocentro de posición, esa bisagra que interpreta Busquets, el dueño del rol. Nuevo paso adelante de un equipo que se está reconvirtiendo: cada actualización es un avance en busca del objetivo final, que consiste en que todos hagan de todo. La multifuncionalidad en las posiciones, la desaparición de la especialización.

3.- Pedro en izquierda, interpretando el decálogo del juego del Barça. Pedro es un actor de cine mudo. No habla, no gesticula, no acapara focos ni conquista premios. Nunca estará en ningún podio. Pero es el aceite que engrasa la maquinaria. No sabemos si en otro equipo de Primera sería titular porque es un futbolista silencioso que juega en las zonas de sombra. Pero es la palanca de los movimientos, la esencia de los mecanismos. Pedro es el que engrasa los ejes.

4.- Para Villa, el fútbol se ha transformado en un ejercicio de estirar la lona y buscar ser ancho y profundo al mismo tiempo, casi un oximorón. Le toca ser estaca y fijar al lateral bien abierto y también ser flecha y hundirse entre la carne rival por el centro. Ancho y profundo, una misión incompatible entre sí, salvo para Villa, otro hombre en la sombra.

5.- Thiago da otro pasito más en su carrera por dejar de ser jugador de jugadas y pasar a ser futbolista. Hace un año pasó varios meses sin disputar partidos: estaba haciendo un máster con Guardiola en el primer equipo. Aprendiendo jerarquías, códigos y conceptos. Los mismos que ahora dicen no comprender porqué hay lesiones musculares (las hay porque esto –aún- es un deporte) decían entonces que Thiago se estaba perdiendo porque no jugaba. Para esa gente, la formación en la alta competición no tiene valor. Pero la realidad de Thiago es que aprendió y hoy empieza a ser futbolista completo. Ocurrió algo parecido con Mascherano y ahora se repite con Fontàs.

7.- En otros equipos hay jugadores singulares que, en momentos de apuro, encienden la luz e iluminan el campo con sus acciones. En el Barça, todos parecen haber nacido con faros en los ojos y luciérnagas en las botas. Llegan al campo iluminados de casa.

8.- La jugada de Iniesta en el primer gol del Barça es el tercer mandamiento del juego de posición: conducir para atraer. Recibe un pase delicioso y Andrés ya sabe lo que le toca: no es rematar, ni lucirse, ni buscar el gol, sino convocar a los defensas. Se frena, caracolea y toca la corneta llamando a los rivales. Conduce para atraerles y les atrae: cuatro salen a por él. Iniesta cede a Messi. Tercer mandamiento del juego de posición.

y 10.- Kubala ya es historia. Messi le ha superado. Gloria y honor al rubio húngaro que paraba el balón con la cabeza, la bajaba con el pecho, la dormía con la izquierda y se iba del central con un tuya-mía con dedicatoria.

- Barça-Racing Santander (Liga, 8ª jornada). 15-Octubre-2011. Camp Nou. 3-0 (Messi, Xavi, Messi) 

PD: Las lesiones musculares tienen, a menudo, una consecuencia muy conocida: la recaída de un músculo antagonista. Los antagonistas son aquellos músculos situados en oposición a los agonistas. Piqué se lesionó hace tiempo el gemelo izquierdo: su antagonista es el isquiotibial derecho. El que sufrió una leve elongación ayer.