En el huerto de La Masia se recolectan tres tipos de medios:
horizontales, verticales y zigzagueantes. Todos se cultivan con idéntico
esmero y se abonan con las mismas esencias, pero al crecer se
desarrollan en direcciones distintas. Unos empiezan de 4 y dan un paso
al frente; otros lo dan al lado; algunos retroceden una línea; todos
florecen a partir de un huerto común. El jardinero les riega con agua
bendita para que aprendan el lenguaje común: debutan siempre en el eje,
como pivotes por delante de los defensas, con metros para pensar, tocar,
distribuir e iniciar el avance colectivo. Después, el destino o la
peculiaridad de cada uno le dirige hacia la posición que ocupará como
profesional y ahí es donde los frutos se dividen por cestos: unos al
horizontal, otros al vertical, los terceros al zigzagueante.
Xavi
es el medio horizontal, Cesc el vertical e Iniesta el zigzagueante.
Thiago es, de momento, un híbrido de los tres, pendiente de encontrar su
cesto definitivo aunque la verticalidad parece ser la tendencia que más
le atrae. Busquets es horizontal y Keita vertical, mientras por abajo
suben especímenes de las tres categorías: Sergi Samper horizontal, Sergi
Roberto vertical, Javi Espinosa zigzagueante. La virtud de los tres
cestos es que permite al entrenador hacer combinaciones de todo tipo con
la certeza que todos los pasillos quedarán iluminados. Se ponga como se
ponga el contrario y aunque intente cerrar todas las puertas, la
existencia de estos tres perfiles diferenciados garantiza que el sentido
del juego fluya por donde se abra algún resquicio. Si el rival se
encierra, uno de los horizontales moverá el balón de un costado al otro
para escorar el buque. Si el rival se extiende a lo ancho, uno de los
verticales se moverá paralelo al eje para segar la carne con un trazo
limpio. Si el rival entrecruza sus trampas, uno de los zigzagueantes
interpretará cabriolas y slaloms para descuartizarle.
La mezcla
de los tres perfiles se compensa en la similitud de los medios. Todos
ellos se parecen (Busquets y Keita no, la verdad sea dicha), pero
ninguno es igual. Preguntado hace tiempo sobre la sucesión de Xavi, la
respuesta de Zubizarreta resultó muy reveladora: “Quizás el Xavi del
futuro es un perfil que no imaginamos (...). Por eso digo que la
polivalencia es muy importante”. Es decir, el Barça post-Xavi seguirá
jugando igual, pero distinto. La clave para asegurar ese futuro pasa por
seguir teniendo medios muy parecidos entre sí y que combinen los tres
perfiles. Por esta razón (y no sólo por ella) es tan importante La Masia
que se inaugura oficialmente el jueves. Es la garantía de que los tres
cestos seguirán dando cada año su cosecha de medios horizontales,
verticales y zigzagueantes.- Publicado en Sport (18-X-2011)