Música | Only Happy When it Rains
# Garbage
En una enfermería, Kaká, Nesta, Cafú, Ambrosini e incluso Shevchenko. Escondidos. Escondiéndose. Amagando hasta el último minuto. En la otra enfermería, sin novedad. Gracias al diluvio universal que se ha abatido sobre Sevilla. Una maravilla. Sin esfuerzo, sin agotamiento, sin nuevos lesionados. Jornada magnífica para el Barça. Rijkaard lo negará en público porque así debe ser. Cualquier deportista debe negarlo. Pero en su intimidad sonríe. Ninguna celebración que rompa el ritmo. Ninguna lesión que rompa el equipo.
Por una vez ha llovido a gusto de todos. Las dos horas de diluvio han sido una competición por ver quien tenía más argumentos para no jugar: si el Sevilla de la UEFA, el Barça de la Champions o el césped anegado. El árbitro ha peleado con denuedo para evitar que el calendario se metiera en un callejón sin salida, pero a todos les iba bien el paréntesis.
Por lo demás, inmenso Villa con su ‘hat trick’ y Cañizares con su pletórica forma. Agónico el Madrid, provocando el hastío de su afición, con un Cassano inenarrable.
Referencias
- 'Silenzio stampa' en la enfermería milanista
- No es bueno no jugar...
- Chuzos de punta en Sevilla (vídeo)
- Juega mejor el Castilla
- Def Con 2, alerta roja
Foto: Teixeira Vitienes con los delegados de Sevilla y Barça (EFE).