Ocho menos diez de la tarde. Alineaciones confirmadas. Las ya previstas:
Dida; Stam, Nesta, Kaladze, Serginho; Pirlo, Seedorf, Gattuso, Kaká; Shevchenko, Gilardino
Valdés; Oleguer, Márquez, Puyol, Gio; Edmilson, Iniesta, Van Bommel; Giuly, Etoo, Ronaldinho
La banda derecha del Milan: Es la más débil. Stam tiene el tobillo apenas recuperado de un fuerte esguince y no es lateral, sino central. Va muy bien por alto y desde el centro de la defensa, pero sufre en velocidad y aguanta mal los driblings en la banda. Para frenar a Ronaldinho recibirá la ayuda constante de Gattuso, que se arriesga a perderse la vuelta ya que tiene tarjeta amarilla. En ataque, sin Cafú no hay nadie por esa banda ya que Shevchenko deambula por ahí,, pero acaba siempre en el centro del área. A Gio le tocará moverse mucho.
La banda izquierda del Milan: La fuerte. Serginho defiende bien y ataca mejor. Le ayuda Seedorf, con esos andares medio dormidos que le adornan. Kaká también acude siempre hacia esa banda, donde se siente cómodo. En momentos de angustia, Ancelotti quita a Pirlo y mete al veterano Maldini para que Serginho se adelante hasta el extremo. Noche dura para Oleguer. Márquez y Van Bommel tendrán que multiplicarse. Los tres están amenazados de sanción.
Pirlodependencia: Es el arquitecto milanista. Si se le frena, el Milan se queda parado, seco, estático. Entre Etoo, Van Bommel e Iniesta le deben presionar hasta ahogarle.
Veteranía, pero piernas pesadas: Kaladze tiene 28 años; Nesta, 30; Stam, 33; Serginho, 34. Mucha veteranía, enorme experiencia, una montaña de títulos. Pero también piernas que a la hora de partido empiezan a pesar de lo lindo. Y Cafú (35) y Maldini (37) como únicos recambios. Si el balón vuela, el Milan se ahoga.
Delanteros de pies ligeros: Kaká y Shevchenko son capaces de todo. El Milan es un diesel atrás, pero una jabalina delante. Hará falta mucha precisión defensiva para evitar el gol italiano.
Sin alternativas: Sólo Cafú y Maldini pueden ser recambios significativos en un momento dado. El resto del banquillo milanista no tiene peso alguno: Ambrosini, Rui Costa, Vogel o Amoroso lo son todo menos desequilibrantes. Tampoco el del Barça tiene relevancia, salvo el frágil Motta o Sylvinho. Por tanto, pocos ‘planes B’ podremos ver en el repleto San Siro.
El gol necesario: el Barça necesita marcar. Si se queda a cero, el partido de vuelta será muy peligroso, con Shevchenko y Kaká al contragolpe.
Foto: Shevchenko y Ronaldinho (Action Images).
