# Eels
Entre las diez de la mañana y las cinco de la tarde votaron 11.160 socios del Madrid. Con una punta mínima de 669 votos entre 10 y 11 de la mañana y un máximo de 2.633 socios entre las dos y las tres del mediodía, lo que da un promedio de 1.594 socios por hora. Sin embargo, de siete a ocho de la tarde votaron 11.866 socios, según la web del club. Es decir, en una sola hora votaron más personas que en las primeras siete horas del proceso. En una única hora votaron siete veces más que en todo el promedio del día.
Yo estaba allí, en la zona de la carpa de votaciones del Bernabéu. Llegué a las seis de la tarde y me fui a las ocho menos cuarto. Entre seis y siete votaron 2.805 personas, récord de la jornada hasta el momento. En la hora siguiente, apenas hubo cambios en la afluencia de público. Como mucho sería aceptable creer que pudieron llegar algunos más: digamos tres mil socios. Y a esta cifra podemos sumarle, siendo muy magnánimos, otros quinientos que entrasen en los diez últimos minutos hasta que cerraron las puertas. Estirando al máximo, 3.500 votantes en esa hora. ¿Por qué la web del Madrid, enmudecida desde las seis de la tarde del domingo hasta la una y cuarto de la madrugada del lunes, anuncia por sorpresa casi doce mil votantes en la última hora? ¿Alguna explicación a este fenómeno? Sólo sé que es físicamente imposible que en 75 minutos votaran 11.866 personas en sólo 36 urnas. Hagamos cuentas:
Aceptemos que los socios dispusieron de 75 minutos: de siete de la tarde a ocho y cuarto, hora oficial de cierre de las urnas. 11.866 personas votaron en 36 mesas, lo que da un promedio de 329 socios en cada urna. Estos votantes dispusieron de 75 minutos para hacerlo, lo que significa que de forma incesante y durante cada uno de esos 75 minutos cuatro socios tuvieron que ejercer su voto en cada urna. O sea, 4,4 socios por minuto y urna, una velocidad descomunal: 13 segundos y 7 décimas por socio.
Cada uno de los casi doce mil socios tuvieron que identificarse con su carné de identidad y el de socio del club y depositar el sobre con su voto en la urna (suponiendo que lo llevase ya elegido y cerrado), más saludar al presidente de la mesa e interventores, así como no detenerse, equivocarse ni frenar la frenética marcha. Y para ello, cada una de las doce mil personas dispuso de 13 segundos y medio. Sencillamente delirante.
Referencias
- Una hora 'imposible' (Real Madrid.com)
- Huele mal, muy mal (Notas de Fútbol)
- 16.000 a las 7; 28.000 a las 8 (Real Madrid.com)
Fotos: AP - EFE - Notas de Fútbol.
