viernes, marzo 24, 2006

No le den más vueltas: Sylvinho de central y Motta de mediocentro


Las dos roturas fibrilares de Márquez y Edmilson dan la auténtica dimensión del papel que juegan ambos futbolistas en el Barça: el defensa imperial que traza la línea roja y el centrocampista que ejecuta el papel de acordeón flexible. Quizás no sean brillantes, pero son esenciales. La conocida ausencia de Puyol convierte estas dos nuevas bajas en sencillamente catastróficas cara al desafío contra el Benfica, pero no impide que el Barça disponga de alternativas fiables. Pensemos un poco en ellas.

Lo primero que hay que anotar es que ningún sustituto es igual al sustituido. Nos equivocamos cuando pretendemos que Iniesta sea como Xavi, Van Bommel como Deco, Giuly como Messi o Larsson como Etoo. Cada uno es cada cual, con sus características específicas, virtudes y defectos. Algunos pueden ocupar posiciones de otros y cumplir decorosamente, pero nadie está llamado a ser un clónico del ausente. La segunda cuestión a tener en cuenta es que Rijkaard es un hombre metódico, serio y sensato. No gusta de hacer probaturas raras ni frivolidad
es excesivas, más allá de los errores que pueda cometer. Por eso, cabe pensar que la triple sustitución que debe presentar en Lisboa será la que más sentido común tenga.

El Benfica-Barça será un partido en el que el equipo local saldrá a mantener su portería a cero, según declaración de principios de Koeman apenas sorteado el emparejamiento. Es decir, con el Benfica amarrando atrás y dejando el control del partido al Barça. Koeman busca no encajar ningún gol en Lisboa e intentar sorprender en la vuelta del Camp Nou al contragolpe. Ya en la ida, por tanto, el Barça tendrá el balón y buscará el gol, por vocación, por motivación y porque el dominio será suyo. Koeman buscará el contraataque mediante dos galgos: Simao y el rápido italiano Miccoli, recuperado ya de su lesión. Y contra este planteamiento sólo cabe una opción: modificar lo menos posible el estilo de juego del Barça. Por tanto, exige no desmontar el centro del campo, de ahí que Motta esté destinado al mediocentro sí o sí, cubriendo las espaldas de Deco y probablemente Van Bommel.

Y ello lleva a una defensa lo más veloz y dinámica posible, con Belleti, Oleguer, Sylvinho y Gio. Sólo si Koeman optara por jugar con Mantorras (mucho más fuerte y estático que Miccoli) podría Rijkaard emplear a Rodri como sustituto de Márquez, pero no parece probable que el técnico holandés emplee a un jugador marginado (aunque jugó el domingo y marcó frente al Rio Ave, más por necesidad que por deseo de Koeman). Es cierto que los automatismos Oleguer-Sylvinho no auguran nada brillante y que las veces que el brasileño se alineó con el Celta de central era en una línea de cinco defensas (dos laterales y tres centrales), pero esta es la opción más lógica, coherente y prudente que Rijkaard puede tomar.

Otra cosa bien distinta es que ante el Getafe y mañana en Málaga juegue al despiste o haga determinadas pruebas, con Motta y Rodri, pero a eso se le llama ocultar las cartas.

Vídeo: El gol de Simao en Liverpool (gentileza de Benficasimao, sin sonido).



Referencias
- Koeman buscará no encajar gol
- El análisis de Marquinos
- Miccoli, recuperado

Fotos: Motta encargándose de Makelele (AP); Simao celebrando su gol en Liverpool (AP); Sylvinho frente al Alavés.