El sucesor de Claude Makelele ya está en el Bernabéu (falta la firma). El Madrid ha tardado tres años en tapar el hueco que dejó el mediocentro francés, quien a su vez había llegado para cubrir el inmenso vacío producido por la marcha de Fernando Redondo. Con Diarra, el Madrid cubre un puesto absolutamente clave en el fútbol moderno: quien tiene un buen mediocentro defensivo tiene un tesoro. Ahora mismo, los mejores nombres mundiales para esta plaza son estos: Makelele (Chelsea), Diarra (Madrid), Gilberto Silva (Arsenal), Edmilson y Márquez (Barça), Zokora (Tottenham), Mascherano (Corinthians) y DeMichelis (Bayern). Naturalmente, sólo menciono a los mediocentros de corte defensivo, no a los creadores o distribuidores (Pirlo, Xavi, Xabi Alonso...) o a los completos (Vieira, Fernando Gago).
El fichaje de Diarra quizás era el más trascendental de cuantos podía realizar el Madrid esta temporada (Cannavaro, Emerson, Van Nistelrooy). Ahora mismo será mucho más importante que el de Emerson, excelente jugador pero cuya mejor etapa ya se ha vivido en la Juve. Diarra tiene todo el futuro por delante y su precio (26 millones), siendo muy elevado, no es desorbitado. Pensemos que Makelele costó 13,8 milllones del año 2000 y fue vendido al Chelsea por 25. O que Essien le costó en realidad 26 millones netos al Chelsea, ya que si bien el equipo inglés pagó 38 millones por el jugador, en la operación habría que descontar los 12 millones que el Olympique abonó por Tiago. El propio Manchester United ha pagado 27 millones por Michael Carrick, aunque el Tottenham le ha sustituido por el marfileño Didier Zokora desembolsando apenas cinco millones, algo parecido a lo que hará el OL ahora: cobrará 26 millones por Mahamadou Diarra y contratará por tres a Alou Diarra, el jugador francés que suplió a Vieira en la final del Mundial.
Dinero aparte, con Diarra se completa ‘la jaula’ de Capello, que podrá contar con cuatro ‘guerreros’ para cerrar esa tela de araña. El damnificado es Javi García, que pasará a la reserva. Y el Madrid sigue precisando imperiosamente un creador en el centro del campo. El amistoso de ayer frente al Betis reveló dos evidencias: una, que Capello jugará muy parecido a Luxemburgo: muy amarrado atrás y con pases directos a sus delanteros, como evitando el tránsito por el centro, quizás por falta de ese constructor; y segunda, que los ‘veteranos’ (Salgado, Helguera...) y los brasileños (Robinho, Baptista, Cicinho...) mantienen los viejos defectos que han desangrado al Madrid estos últimos años. Así que ahora queda por ver si Capello apuesta por un centrocampista de creación (Guti) o simplemente prescinde de él y se dedica a cerrar ‘la jaula’ y jugar al contragolpe. Y también qué sucede con veteranos y brasileños, poco adecuados para el estilo guerrero que quiere el técnico italiano.
La impugnación del Espanyol
Me temo que en el asunto Xavi-Puyol ha habido errores por todas partes. Por la Federación porque ella misma ha sido la fuente generadora del conflicto. Es absurdo convocar para un amistoso intrascendente a jugadores de un equipo que dos días más tarde han de jugar un partido oficial organizado por la misma federación. Da igual de qué equipo sean esos jugadores. Islandia demostró más sentido común al no convocar a Gudjohnsen. También se equivocó el Barça al no preservar las formas. Es muy feo alegar la lesión de Puyol y la prudencia con Xavi (ciertas ambas) y hacerles regresar de inmediato a los entrenamientos públicos. Como ejercicio de relaciones públicas ha sido un desastre. No basta con tener razón, sino que muchas veces también hay que evitar imágenes que aparenten lo contrario y el Barça no ha sabido administrar el problema. Y pienso que también el Espanyol se ha equivocado. No porque no pueda impugnar, que está en su pleno derecho, sino porque ha errado en la argumentación: Xavi y Puyol fueron oficialmente desconvocados por la Federación y a partir de ahí cualquier impugnación queda desarticulada. Tampoco ha sido una actuación feliz. También Marion Jones
No puede sorprender a nadie que Marion Jones haya dado positivo por EPO. Llevaba demasiados años rodeada de tramposos como para creer que ella se mantenía limpia. En realidad no está sucediendo nada que no ocurriera antes. No hay más doping que en los últimos treinta años. Simplemente, los controladores se han puesto las pilas y están pillando a los tramposos, algo que hasta ahora conseguían sólo en cuentagotas. Están cayendo como moscas porque por vez primera en esta carrera la policía ha adelantado a los ladrones.Referencias
- Los artículos de la polémica
- Otra más en la red del doping
Fotos: AFP - Real Madrid.com - AP. Gráfico: Marta Perarnau.
