Kaká ha salvado al Milan de la hecatombe. El equipo de Ancelloti ha quedado a un solo gol del precipio: si el Schalke hubiese marcado un tercer tanto en San Siro, los milanistas estarían a estas horas haciendo las maletas para jugar la UEFA, pero ya sabemos que el Milan es como el Bayern: da igual como juegue, que al final gana. El Milan-Schalke (3-2) lo han decidido dos goles de frialdad del majestuoso Kaká, que ni se ha despeinado en su ejecución. Kaká es la cara amable y genial de un equipo que tiene en Gattuso su rostro pendenciero, el de un futbolista desquiciado incapaz de saber ganar, si nos basamos en su reacción final de humillación hacia el eliminado Poulsen. En cualquier caso, el Milan es primero de grupo y aparece en el horizonte del Madrid.
Rivales del Madrid: En el horizonte blanco para octavos de final hay dos equipos italianos (Milan e Inter) a cual más peligroso y vengativo; dos ingleses (Liverpool y Arsenal); y si el Vila-real cumple hoy, un quinto rival a elegir entre Bayern o Juve. Es decir, cinco equipos en el bombo y ninguno fácil para un Madrid que ha confirmado que los chicos del Castilla aún no están maduros para sustituir a los "galácticos". López Caro ha planteado bien tácticamente el intrascendente partido de Atenas y algunos jóvenes han mostrado buenas maneras (De la Red, Adrián Martín, Balboa y Soldado), así como Pavón y Ramos, pero no ha bastado para vencer al veterano Olympiakos (2-1) en un encuentro en que Rivaldo ha recordado viejos tiempos y ha apuntillado al Madrid. López Caro aparenta buenos modos y conocimiento futbolístico, además de sensatez, tres virtudes que se echan en falta en el Bernabéu pero que quizás no bastarán para alargar su tarea más allá de Navidad, ahora que hasta Ruud Gullit se suma a la larga lista de candidatos.
Rivales del Barça: En el horizonte del Barça se atisba ya al Chelsea, incapaz de apurar al Liverpool (0-0) que suma su noveno partido consecutivo sin encajar un solo gol. 810 minutos sin que a Pepe Reina le marquen un tanto, desde el pasado 25 de octubre frente al Crystal Palace. El partido inglés ha sido soporífero, como cada vez que se espera un gran encuentro. Chelsea y Liverpool se han enfrentado cuatro veces en Champions en menos de ocho meses y en 360 minutos sólo han sido capaces de marcar un gol (y además, "fantasma", el de Luis García en las últimas semifinales). Además de Chelsea, al Barça le puede corresponder el PSV, Glasgow Rangers, Ajax, Juve o Bayern y uno de entre Lille, Manchester United o Benfica. El que ya ha quedado eliminado es el campeón de hace dos años, el Oporto, que ni siquiera tendrá el consuelo de jugar la UEFA como el Betis, caído en casa ante el Anderlecht (0-1).
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- Regreso acelerado a la Edad de Hierro
