miércoles, marzo 28, 2007

Promedios goleadores que marcan tendencia


Si en los once partidos que faltan para acabar la Liga mantienen los promedios goleadores de las primeras 27 jornadas, el Barça sumará 80 goles (exactamente los mismos que la temporada pasada), el Sevilla 67 (trece más), el Madrid 52 (18 menos) y el Valencia también 52 (seis menos). ¿Se puede ganar la Liga marcando apenas una cincuentena de goles? Sí, el Valencia de Benítez la conquistó en 2002 con 51 goles favorables, prácticamente los mismos que ha conseguido ahora en los primeros dos tercios de competición. Sin embargo, aquel Valencia era bastante más consistente defensivamente, pues sólo encajó 27 tantos en todo el campeonato, casi los mismos que ya ha recibido a falta de once jornadas (26).

Y en cualquier caso, es la absoluta excepción a la regla: en los últimos veinte años todos los campeones han obtenido como mínimo 71 goles, salvo el Superdepor en 2000 (66 tantos) y el citado Valencia de 2002 (51). Así que va a resultar difícil negociar la pelea por el título desde la escasez goleadora. Por descontado, este no es el único indicativo que afecta en la disputa de un campeonato, pero sí es un factor muy relevante ya que el análisis de la composición goleadora de cada aspirante arroja algunas conclusiones de interés.

Barça (57 goles)


El actual campeón ha sumado 57 goles en 27 partidos, a un promedio de 2,11, prácticamente idéntico al de la temporada pasada (2,10) y mejor que el de hace dos (1,92 para 73 tantos). Los 57 goles han sido logrados por trece jugadores: Ronaldinho (17), Eto’o y Messi (7 cada uno), Gudjohnsen y Saviola (5 cada uno), Iniesta (4), Giuly y Xavi (3 cada uno) más los goles solitarios de Márquez, Puyol, Deco, Ezquerro y Zambrotta. Esta composición tiene diferencias, pero también parecidos, relevantes respecto del año pasado, donde Eto’o sumó 26, Ronaldinho logró 17 (los mismos que tienen en este momento), Larsson 10 (la suma actual de Gudjohnsen y Saviola), Messi 6 (uno menos que los ya sumados), Giuly 5 y Deco tres. Es decir, ante la lesión de Eto’o, el resto de compañeros, y muy especialmente Ronaldinho, está compensando el déficit del camerunés para mantener el promedio general.

Otro asunto interesante es que mientras Messi ha anotado en cinco de los 15 encuentros que ha disputado, Eto’o ha conseguido sus siete goles también e
n cinco partidos, pero sólo ha disputado ocho en todo el campeonato. Por su parte, Ronaldinho ha logrado marcar en 12 de los 23 partidos que ha jugado, o sea en más de la mitad de ellos. Como veremos al repasar los datos de Van Nistelrooy o Villa, este es un factor trascendente para un equipo.

Sevilla (48 goles)


El colíder de la Liga arrastra un promedio goleador (1,77 por partido) mucho mejor que el de la pasada temporada (1,42), cuando sus 54 tantos le llevaron a la quinta plaza final. Como el Barça, sus goleadores son trece: Kanouté (19), pichichi absoluto, L
uis Fabiano (7), Renato, Alves y Kerzhakov (3 cada uno), Adriano (2) y con un gol Chevantón, Alfaro, Martí, Navas, Poulsen, Drago y Escudé. Podríamos decir que hay una elevada kanoutédependencia por razones obvias, máxime si observamos la composición de la temporada anterior, donde el máximo goleador del equipo fue Saviola (9), seguido por Maresca (8), Kanouté y Kepa (6) y Luis Fabiano (5). Ahora, ni Saviola ni Kepa están en el equipo y Maresca se encuentra en sequía absoluta por lo que ha sido Kanouté el factor rotundo que ha elevado el promedio goleador del campeón de la UEFA.

Algún jugador lleva un promedio decepcionante, como Chevantón, con un solo gol en nueve apariciones, mientras el ruso Kerzhakov, llegado en invierno, ha sumado tres en seis partidos. Luis Fabiano completa ya más que en todo el curso anterior,
pero sólo marca en el 30% de los partidos (ha goleado en seis de sus 17 partidos), mientras Kanouté lo ha conseguido en 15 de los 26 que ha jugado, una aportación decisiva.

Madrid (37 goles)


Hace diez años, el Madrid de Capello ganó la Liga con 85 goles, pero la historia no va camino de repetirse, pues el actual lleva un promedio de 1,37 goles por partido, muy alejado de la tradición madridista. La pasada temporada, el Madrid de Luxemburgo y López Caro sumó 70 tantos, a 1,84 por encuentro. Pero entonces había cuatro jugadores con una aportación clave: Ronaldo (14 goles), Zidane (9), Baptista y Robinho (8 cada
uno). Hoy, los tres primeros ya no están y el cuarto es una sombra de sí mismo, con dos tantos en todo el torneo.

En el aspecto goleador, el Madrid está pagando las consecuencias de la estrategia marcada por Capello y Mijatovic. Mientras Soldado suma ocho tantos con Osasuna y Portillo siete con el Nàstic, el Madrid basa su potencial en Van Nistelrooy, que co
n 14 goles supone casi el 40% del equipo, pero que sólo ha conseguido marcar en 8 de los 25 partidos que ha jugado, con lo que en dos tercios de los mismos se ha quedado en blanco. Y con él, el equipo pues la aportación de sus compañeros ha sido escasa: Raúl (4), Beckham y Reyes (3 cada uno), Robinho, Diarra, Ramos y Roberto Carlos (2 cada uno) y con uno, Emerson, Cassano, Higuaín y Ronaldo, más David García en propia puerta.

Muy poca artillería para el equipo, fiado todo a un único delantero que sólo marca en el 30% de los encuentros, con algunos datos realmente duros: Higuaín ha obtenido un único gol en ocho apariciones; Reyes ha sumado tres en 23 partidos; y Raúl, cuatro en 24 encuentros.


Valencia (37 goles)


El Valencia de Quique lleva el mismo promedio que el Madrid de Capello (1,37), pero inferior al de la temporada pasada (1,52 para 58 tantos al final). La causa se llama David Villa, que hace un año sumó 25 goles y ahora mismo apenas lleva diez. Ni siquiera es máximo goleador del equipo, pues Morientes suma 11, por 5 de Angulo, 3 de Vicente, 2 de Ayala y Silva y uno de Albiol, David Navarro, Joaquín y Hugo Viana, diez jugadores en el cómputo total. Cifras muy escasas, aunque no muy alejadas de las del año pasado, salvo en el caso de Villa, totalmente atascado pues sólo ha goleado en ocho de los 25 partidos disputados, la tercera parte. Por su parte, Morientes es más regular ya que ha marcado en diez de los 22 partidos jugados, pero todos estos datos arrojan serias dudas sobre la fiabilidad del equipo, por lo que no extrañaría ni el fichaje del joven Mata ni tampoco el de otro goleador para la próxima temporada.

Fotos: AFP - Reuters - Getty - EFE.