miércoles, marzo 14, 2007
Golobart: “Los jugadores del Sevilla aún no han firmado el contrato de su vida. El Barça futuro tendrá un estilo más defensivo”
Esta que sigue es la segunda parte de la entrevista a Joan Golobart, analista futbolístico, antiguo interior izquierda del Espanyol.
Pregunta.- Volvamos a la Liga. El Sevilla es colíder y en algunos aspectos se asemeja al Valencia, aunque con más cuerpo, pero está compitiendo en tres torneos...
Respuesta.- Le veo distinto al Valencia en cuanto a sus jugadores. Los del Valencia tienen talla defensiva. Los del Sevilla son más ofensivos: Kanouté, Alves, Poulsen... Gente con voluntad de dar un pase hacia delante para ganar el partido. Y con una ventaja añadida: en un alto porcentaje son jugadores que aún no han firmado el contrato de su vida. Lo malo es que tienen tres frentes de juego. Y lo peor es que están empezando a demostrarse a sí mismos que cada vez que tienen ocasión de tomar el mando de la Liga lo pierden. Y ese pensamiento empieza a calar hondo. Ya no piensan en términos de recompensa, sino de fallos. Es un equipo idóneo para los torneos por eliminatorias.
P.- ¿Le ves como un equipo de largo recorrido en el futuro, que no va a ser un proyecto cortoplacista?
R.- Posee una buena estructura técnica, pero necesita tiempo. Si pierde a dos de los tres puntales (Kanouté, Alves, Poulsen) necesitará tiempo para la adaptación de los nuevos. Y también está ahí otro factor: si se lo creen o no. El éxito es un recorrido que te desvía hacia el fracaso. Y el Sevilla ha tenido mucho éxito. No sé si posee el libro de ruta necesario para quedarse con los pies en la tierra. No lo tiene fácil para subir aún más arriba y permanecer largo tiempo, pues aunque tenga dinero a igualdad de ofertas la mayoría de jugadores optará por el prestigio de un Madrid o un Liverpool.
P.- Llegamos al líder, que también ha sido el líder en decepciones...
R.- En verano había gente y periódicos que hablaban de un Barça de las 7 copas, sin caer en la cuenta de que desde el Milan de Sacchi en 1989 nadie ha logrado repetir en Copa de Europa. Ganar no es fácil por más colores que tenga tu camiseta. Pese a todo, es mi favorito para la Liga porque ha llegado hasta aquí sin Eto’o ni Messi y esos dos son una pareja de refuerzos invernales de mucho peso. ¿Qué diríamos si Valencia o Sevilla hubiesen fichado a Eto’o y Messi para estos doce últimos partidos? Creo que el Barça ganará la Liga porque los demás fallarán. Es cierto que el Barça ha fallado mucho defensivamente, pero lo ha hecho en un momento en que aún puede rectificar. Rijkaard, conscientemente o no, tiene una manera muy buena de manipular el vestuario. Llega y les da 45 minutos a los capitanes para resolver la crisis con Eto’o. Es la mejor forma de hacerlo: darle la responsabilidad al vestuario. Eso provoca que la gente reaccione.
P.- La mayor parte de sus 50 puntos los ha obtenido contra equipos medianos o pequeños y en los doce partidos que le quedan al Barça se enfrenta mayoritariamente a equipos de ese estilo...
R.- Ese es un buen factor. Y también cambiar el chip. En Barcelona hay un pensamiento único con respecto al fútbol del Barça que pretende que su juego se distingue por tocar mucho el balón. Y no es cierto. El auténtico Barça de Rijkaard se distinguía por robar en campo contrario, cuatro pases rápidos, una virguería y gol. Un Barça de elaboración lo hemos visto poco y en las grandes ocasiones, aún menos. No digamos esta temporada, en la que grandes y pequeños han aprendido que frente al Barça no pueden perder el balón en campo propio. Pero volviendo al tramo final de Liga, pensemos que un equipo grande aprovecha una de cada tres ocasiones de gol. Uno equipo medio o pequeño, no. En noventa minutos, el Barça tendrá diez o quince minutos buenos y marcará las diferencias. Mucho puntos y poca brillantez, en resumen.
P.- ¿Por qué el Barça de este año está dos peldaños por debajo? ¿La condición física, el conocimiento de los rivales, la falta de alternativas, el dormirse en los laureles?
R.- Es una suma de factores. Igual que el éxito sólo llega por la suma de detalles bien ejecutados, el fracaso también. El Barça generó con Davids un sistema de juego cuya esencia era robar el balón en campo contrario. Pero los rivales han aprendido el truco y ahora el Barça se ve obligado a desplazamiento largos o a mover el balón en zonas sin riesgo. El porcentaje de posibilidades de robar balón en zonas peligrosas se ha reducido. Además, la presión en campo contrario exige tener jugadores muy técnicos, rápidos y con imaginación y, por lo general, este tipo de jugadores no disfrutan con la preparación física. El Barça había trabajado muy bien este aspecto, pero sus efectos no duran más allá de dos temporadas. La filosofía del rondo tiene una vertiente positiva porque te acostumbras a los movimientos rápidos, pero también una negativa, pues trabajas muy poco el físico. Y añádele que hablamos de jugadores muy jóvenes, con toda la ciudad hablando de ti, de lo guapo que eres. Es difícil no creérselo y mantener el instinto de ganar.
P.- También ha habido una buena empanada mental en el aspecto táctico...
R.- Sí, porque Rijkaard ha intentado buscar tácticas que permitieran compensar el bajo nivel físico. No me extrañaría ahora ver más veces a Messi o Ronaldinho de media punta, por ejemplo. Pero no hay que fijarse en exceso en el dibujo táctico. Por ejemplo, lo del 3-4-3. Te diría que casi cualquier equipo que juega en 4-4-2 en algún momento del partido puede pasar al 3-4-3. Incluso en el Espanyol de Clemente lo hacíamos. Yo era interior izquierdo y mi lateral era Miquel Soler, que ya sabes cómo subía al ataque. En un momento determinado hacíamos un aclarado, yo me iba al centro, abría hueco y subía Soler. Ya estábamos en 3-4-3. Pero sólo puntual. Es algo que puede hacerse en momentos. Otra cosa es salir del vestuario anunciándolo. Y esa no sé si ha sido una decisión elegida por útil o por el qué dirán. Porque parece que en el Barça renunciar a un punta sea sacrilegio. Y no lo es. Tu plantas un 4-4-2 y buscas variaciones para tener un tercer punta, pero no hace falta salir con tres centrales que, además, salvo Puyol no son rápidos. Así sólo consigues enloquecer a tu pivote defensivo. Márquez es un pivote de gran categoría, pero se vuelve loco cuando tiene más trabajo del razonable...
P.- Pero el invento salió bien en Zaragoza...
R.- Fue una buena opción para tener igualdad en el centro del campo, pero su virtud fue la sorpresa. Rompió mentalmente al Zaragoza y a Víctor Fernández, que no comprendieron lo que ocurría y ya estaban perdiendo la eliminatoria. Pero no es lo mismo el Zaragoza que el Madrid. El Zaragoza juega muy bien cuando va de perdedor; pero muy mal cuando va de favorito. Lo que desequilibró esa eliminatoria fue la sorpresa, no el sistema. Y ese éxito para el Barça en un partido fue también su fracaso porque obligó a la continuidad del esquema. Tras Zaragoza no había razón alguna para no repetir, pues si vuelves a cambiar enloqueces a los jugadores. Así que fue un éxito a corto plazo, pero un fracaso a medio, sobre todo si no cuentas con dos laterales rápidos pero defensivos como eran Sergi y Ferrer.
P.- Quizás la gran decepción de la temporada para el Barça se llama Deco.
R.- Deco llega siendo la gran figura de la Eurocopa 2004. El jugador que realiza más faltas tácticas de la Eurocopa. Fue curioso porque yo tenía una imagen suya de jugador ofensivo. Le conocí en un partido del Oporto contra el Espanyol en UEFA y era un media punta muy técnico hasta que Mourinho le reconvirtió. Antes jugaba poco para el equipo y pasó a ser lo contrario. Pero en estos momentos, los equipos rivales ya han decidido no jugar el balón en la zona que pisa Deco. Por eso Deco desaparece durante los partidos. Es un jugador superútil, con una personalidad arrogante, que quizás fue la clave de su éxito. Opina y contrasta siempre. No es un jugador fácil, que ahora ya no se encuentra tan a gusto en el Barça. Dudo que continúe. Como futbolista disfrutará más en otro equipo.
P.- El mediocentro defensivo es objeto de mil y un debates, pero sin un nombre claro y rotundo.
R.- Claro, ¿a quién traigo? ¿Albelda, Xabi Alonso? Ellos juegan ahora con unos compañeros. En el Barça tendrían al lado a Xavi o Iniesta y eso puede ser problemático porque será muy distinto a lo que están habituados. Podemos decir: no me gusta Márquez, no me gusta Edmilson. Pero, ¿me gustará fulanito? Si el equipo mejora físicamente con respecto a este año y se mantiene el 4-3-3, nombres como Albelda o Xabi Alonso pueden ser la opción aunque dudo que los rivales le otorguen esa oportunidad. El análisis que hay que hacer no es de nombres, sino de estilo. ¿Qué pasará en el futuro, cómo jugará el Barça? Posiblemente con un estilo más defensivo. El Barça ganó la Champions jugado a la italiana los partidos importantes. Con cinco o seis hombres siempre en defensa, sin moverse de su zona, y atacando con cuatro, a veces con cinco. Eran dos equipos. Uno defendía y el otro atacaba.
P.- O sea que no es cuestión de nombres, sino de estilo y de perfiles...
R.- El Barça deberá aclarar a qué quiere jugar. El Camp Nou es como el Liceu, donde siempre hay que dar el do de pecho, pero para vencer en el fútbol actual hay que hacer más cosas. Cuando quede claro a qué se quiere jugar, entonces se puede hablar de nombres. Porque no es lo mismo defender como mediocentro si a tu derecha tienes a Steven Gerrard que si tienes a Xavi Hernández. Ahora mismo, el Olympique de Lyon llora por la pérdida de Diarra, pero en el Madrid quieren quitárselo de encima. Ahora mismo, en el Bayern se lamentan por no tener a Ballack y en el Chelsea, por tenerlo. Es la paradoja. Según a lo que juegues, unos jugadores te sirven o no. Eso hay que comprenderlo y dejar de pagar millonadas por jugadores que no necesitabas.
* La primera parte de esta entrevista ha sido publicada en el post inmediatamente anterior.
Fotos: AP - AFP - Getty - EFE.