Cruyff llegó al Barça y revolucionó un equipo que llevaba 14 años sin ganar una liga. Puso patas arriba el campeonato, lideró un 0-5 glorioso en el Bernabéu y devolvió la dignidad al club. Todo eso en el primer año. Después se durmió en los laureles cuatro temporadas seguidas y acabó sacando los fueras de banda y dando instrucciones a los compañeros. Nunca más volvió a ser el prodigioso jugador del primer año.
Y en esas anda Ronaldinho, renovado hasta 2010 y ya en fase de pre-jubilación anticipada. El sábado durmió durante todo el primer tiempo y sólo la vergüenza ajena debió estimularle a cambiar de ritmo, ante las exhibiciones de Messi y Eto'o. Pero tras un par de virguerías acabó sacando también algun fuera de banda. Este chico parece imitar al 'gran flaco'.