El Barça empieza este sábado a preparar Wembley. Lo hará como acostumbra: con un microciclo estructurado de 14 días de duración, un auténtico lujo a estas alturas de competición. Una semana de carga elevada de trabajo, seguida de otra de carga mínima y reducida, con todos los jugadores de la plantilla a disposición del entrenador, una vez Adriano reciba el alta médica hoy mismo y Milito la próxima semana. Reacondicionamiento físico después de las grandes batallas y tras un mes y medio agónico en el que el equipo solo ha hecho mantenimiento de la condición, dado el estrés competitivo sufrido: 13 partidos en 44 días. Trece partidos de máxima intensidad (cuartos y semis de Champions; cuatro veces contra Real Madrid, incluyendo la sentencia de la Liga), disputados con tres días de separación cada uno de ellos y unido a ausencias importantes por lesión (Puyol, Pedro, Adriano, Bojan, Maxwell) y a la baja de Abidal por enfermedad, lo que ha obligado a parchear el equipo y exigir esfuerzos descomunales a hombres fundamentales como Xavi, Busquets, Piqué, Messi o Iniesta.
¿Cómo está el equipo?
El equipo está agotado, pero no es fatiga física (que también) sino mental, a lo que ha contribuido poderosamente los agresivos enfrentamientos con el Madrid. Desde el punto de vista estrictamente físico no hay problemas: el Barça se preparó como acostumbra, con una carga potente en enero y febrero, lo que le ha permitido afrontar estos decisivos 44 días sin dificultad física, al margen de que las numerosas bajas hayan multiplicado la exigencia del equipo titular. Pero los parámetros esenciales se mantienen a nivel alto. Las mayores dificultades residen en dos aspectos: la recuperación mental de jugadores que han sufrido mucho (varios están bastante afectados por lo ocurrido con el Madrid) y la recuperación del nivel de forma de los que estuvieron lesionados.
El equipo está agotado, pero no es fatiga física (que también) sino mental, a lo que ha contribuido poderosamente los agresivos enfrentamientos con el Madrid. Desde el punto de vista estrictamente físico no hay problemas: el Barça se preparó como acostumbra, con una carga potente en enero y febrero, lo que le ha permitido afrontar estos decisivos 44 días sin dificultad física, al margen de que las numerosas bajas hayan multiplicado la exigencia del equipo titular. Pero los parámetros esenciales se mantienen a nivel alto. Las mayores dificultades residen en dos aspectos: la recuperación mental de jugadores que han sufrido mucho (varios están bastante afectados por lo ocurrido con el Madrid) y la recuperación del nivel de forma de los que estuvieron lesionados.
¿Qué trabajo se realizará?
Desde este sábado y hasta el viernes 20, los planes son entrenar al grueso del equipo con alto volumen de carga. Seis entrenamientos elevados y muy específicos, en los que se trabajará básicamente la Fuerza Explosiva, objetivo esencial en este momento del fin de curso. En esta semana de carga, el volumen de entrenamiento oscilará según los días y se verá interrumpido por algún simulacro competitivo en forma de partido, sea entre los propios componentes del primer equipo o con participación del filial.
La mayor carga la recibirán, fundamentalmente, los hombres que han sostenido el equipo en este último mes y medio: Alves, Piqué, Mascherano, Busquets, Xavi, Iniesta, Messi y Villa. Los restantes recibirán cargas personalizadas en función del momento que vive cada uno. Los que salen de lesiones (Adriano, Bojan y Maxwell) y los que ya se han recuperado de ellas (Puyol y Pedro) realizarán entrenamientos específicos individualizados para alcanzar un estado de forma cercano al idóneo, pese a lo dificultoso de la tarea. A la presencia de Thiago y Fontàs se une de manera continua, quizás hasta Wembley, la de Marc Bartra.
Desde este sábado y hasta el viernes 20, los planes son entrenar al grueso del equipo con alto volumen de carga. Seis entrenamientos elevados y muy específicos, en los que se trabajará básicamente la Fuerza Explosiva, objetivo esencial en este momento del fin de curso. En esta semana de carga, el volumen de entrenamiento oscilará según los días y se verá interrumpido por algún simulacro competitivo en forma de partido, sea entre los propios componentes del primer equipo o con participación del filial.
La mayor carga la recibirán, fundamentalmente, los hombres que han sostenido el equipo en este último mes y medio: Alves, Piqué, Mascherano, Busquets, Xavi, Iniesta, Messi y Villa. Los restantes recibirán cargas personalizadas en función del momento que vive cada uno. Los que salen de lesiones (Adriano, Bojan y Maxwell) y los que ya se han recuperado de ellas (Puyol y Pedro) realizarán entrenamientos específicos individualizados para alcanzar un estado de forma cercano al idóneo, pese a lo dificultoso de la tarea. A la presencia de Thiago y Fontàs se une de manera continua, quizás hasta Wembley, la de Marc Bartra.
¿Y la última semana?
Tras el cierre liguero contra el Málaga, el volumen de entrenamiento se reducirá al mínimo. Todo el trabajo estará hecho y solo quedará asimilar las cargas efectuadas para transformarlas en velocidad, explosividad y frescura. Es decir, en estado óptimo de forma para Wembley. La última semana de la temporada, por tanto, se empleará en afinar dicho estado de forma con entrenamientos muy ligeros, así como en preparar acciones tácticas puntuales para la final.
Tras el cierre liguero contra el Málaga, el volumen de entrenamiento se reducirá al mínimo. Todo el trabajo estará hecho y solo quedará asimilar las cargas efectuadas para transformarlas en velocidad, explosividad y frescura. Es decir, en estado óptimo de forma para Wembley. La última semana de la temporada, por tanto, se empleará en afinar dicho estado de forma con entrenamientos muy ligeros, así como en preparar acciones tácticas puntuales para la final.
¿Quién jugará en Liga?
Los planes técnicos prevén que este domingo descansen la mayoría de los hombres que han sostenido el andamio el último mes y medio. Piqué, Busquets, Xavi y, posiblemente, Messi y Villa verán el partido contra el Depor desde el banquillo o la grada. Incluso Alves y Valdés podrían verse en la misma situación. Será la hora de Iniesta y Pedro (reservados ex profeso ante el Levante) más Mascherano, Fontàs, Abidal, Keita, Thiago, Afellay y quizás Bojan, Jeffren e incluso Bartra. La presencia de Puyol dependerá de su absoluta recuperación. Guardiola busca que, sumados los partidos de Levante y Depor, todos sus jugadores disponibles puedan acumular 90 minutos de juego esta semana.
Los planes técnicos prevén que este domingo descansen la mayoría de los hombres que han sostenido el andamio el último mes y medio. Piqué, Busquets, Xavi y, posiblemente, Messi y Villa verán el partido contra el Depor desde el banquillo o la grada. Incluso Alves y Valdés podrían verse en la misma situación. Será la hora de Iniesta y Pedro (reservados ex profeso ante el Levante) más Mascherano, Fontàs, Abidal, Keita, Thiago, Afellay y quizás Bojan, Jeffren e incluso Bartra. La presencia de Puyol dependerá de su absoluta recuperación. Guardiola busca que, sumados los partidos de Levante y Depor, todos sus jugadores disponibles puedan acumular 90 minutos de juego esta semana.
Sin embargo, dado que el ritmo-competición es básico para afrontar Wembley, la alineación del último partido en Málaga tendrá tintes de lujo. Tras una semana de carga, y aunque tengan las piernas pesadas, en La Rosaleda estará el equipo de gala, porque no hay nada peor que dos semanas seguidas sin competir. Ese día, prácticamente todos los que serán titulares en Wembley cerrarán la Liga en Málaga.
- Publicado en Sport (13-V-2011)
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