A finales de febrero, el Valencia habrá recuperado a varios de sus jugadores lesionados y puede aspirar a una buena trayectoria en la fase decisiva de la Champions. Para ello contará con la posible ventaja de un rival ‘débil’: Inter, PSV, Celtic, Oporto o Lille. Es cierto que en esa lista están los indiscutibles líderes de las ligas italiana y portuguesa, pero también otros equipos de pequeña talla. Por el contrario, Barça y Madrid tienen garantizada una gran batalla debido a la impresionante categoría de los primeros de grupo: los cuatro ‘grandes’ de la Premier, el imbatible Olympique, el tractor alemán (Bayern), el viejo Milan... aunque a estas alturas varios de ellos estarán más preocupados por si el sorteo les empareja con Barça o Madrid que al revés.
El Bayern es uno de ellos. Mantiene las virtudes que le han hecho grande: esfuerzo, generosidad, lucha hasta el último instante, pero anda huérfano de talento. El Arsenal continúa en baja forma, necesitado de un delantero centro por más que Wenger se empeñe en no querer uno. El Liverpool juega a ráfagas: días excelsos, pero otros muchos grises y amorfos, sin rumbo claro. Y el Milan. El naufragio. Nave hundida sin timonel ni horizonte. Sin fútbol y casi sin futbolistas, con Ancelotti boqueando. Cuatro equipos míticos de la Europa futbolística que no están viviendo sus mejores horas, por lo que no dudo que Barça y Madrid se pedirían hoy a cualquier de ellos, con preferencia por el descoyuntado Milan. 
Pero ¿cómo estarán en marzo? Esa es la cuestión y no las sensaciones en diciembre. Los equipos crecen o se encogen y entran en buenas o malas dinámicas (recordemos el cataclismo valencianista actual). Hace un año, el Arsenal era una piltrafa, pero Henry se recuperó de su lesión en el tendón de Aquiles, las piezas se juntaron y el equipo de Wenger llegó a la final de París. Puede ocurrir de nuevo, así que no cabe descalificar hoy a nadie por su situación momentánea, sino estar atento a los síntomas que revelen por dónde va la tendencia de un conjunto. 
La Champions es siempre la competición de la incertidumbre, de la relatividad en los valores, delpaseo por el filo de la navaja. Lo que hoy es claro se oscurece en pocos días. El equipo con flaquezas es capaz de tomar aire y romper los pronósticos en una noche de aciertos. La Champions es una competición en la que estrategias y tácticas tienen gran relevancia, pero que se decide por el número de errores trascendentales por lo que resulta temerario aventurar fortalezas y debilidades en esta hora. Lo único cierto es que grandes cuadros como Werder Bremen, Benfica o CSKA se han ido a la UEFA a por el Sevilla. Y que el ‘camino de los ingleses’ apunta a Barça (50% de posibilidades) y Madrid (66,6%). Pero eso será dentro de 75 días, cuando muchas cosas y muchos nombres habrán cambiado.Primeros de grupo: Chelsea, Bayern, Liverpool, Valencia, Olympique, Manchester, Arsenal y Milan
Segundos de grupo: Barça, Inter, PSV, Roma, Madrid, Celtic, Oporto y Lille
Rivales del Barça: Bayern, Liverpool, Olympique, Manchester, Arsenal o Milan (50% ingleses)
Rivales del Madrid: Chelsea, Bayern, Liverpool, Manchester, Arsenal o Milan (66,6% ingleses)
Rivales del Valencia: Inter, PSV, Celtic, Oporto o Lille
A la UEFA: Werder Bremen, Spartak Moscú, Girondins, Shakhtar, Steaua, Benfica, CSKA, AEK
