El técnico del Barça B, Eusebio Sacristán, dispone de dos segundos entrenadores: Joan Barbará y Carlos Hugo. El técnico de la Roma, Luis Enrique, antecesor de Eusebio en el filial del Barça, no tiene ninguno a día de hoy. Se le ha ido su mano derecha, Iván de la Peña. Oficialmente, por problemas personales y de forma temporal. Pero dirigentes del club nos dicen lo contrario: por razones profesionales y de manera definitiva. En concreto porque no podía ejercer una parte de la dirección deportiva, que es lo que imaginó que podría hacer en el club romanista.
Con la llegada de Thomas DiBenedetto, nuevo propietario estadounidense, a la Roma, el director deportivo Daniele Pradé presentó su dimisión y fue sustituido por Walter Sabatini. Como director técnico se mantuvo Bruno Conti. Y días más tarde, Franco Baldini fue nombrado director general de la entidad (Baldini aún es ayudante de Fabio Capello en la selección inglesa). Así que los deseos de Iván de la Peña chocaron con un triple muro: Baldini, Sabatini y Conti proceden de la dirección deportiva, con lo que el puesto está más que ocupado. El frustrado fichaje de Kameni, recomendado por De la Peña, evidenció el peso de Sabatini, protagonista de la contratación final del meta Stekelenburg.
La marcha del exjugador cántabro deja al descubierto a Luis Enrique, bien pertrechado en el ámbito de la preparación física (Rafel Pol), la psicológica (Joaquín Valdés), el scouting (Robert Moreno y Marcos López) y la relación con la directiva (Toñín Llorente), pero sin segundo entrenador por el momento salvo que De la Peña reconsidere su decisión. Explica “La Gazzetta dello Sport” que De la Peña asesoró a Luis Enrique sobre dónde vivir en Roma y el entrenador asturiano eligió Olgiata, una zona tradicionalmente “laziale”, lejana a Trigoria, escenario de los entrenamientos de la Roma. Se da la curiosidad que quien ejercía de segundo entrenador en el Barça B con Luis Enrique, Joan Barbará, no fue invitado a la aventura romana y sigue en el club ejerciendo la misma labor, que comparte con el ayudante de Eusebio, Carlos Hugo.
