El próximo 1 de Julio, Jon Miquel Toral firmará contrato con el Arsenal. Habrán pasado cinco meses desde que cumplió los 16 años (2 de febrero de 1995) y, con su marcha, la cantera del Barça habrá perdido a una de sus promesas más cuajadas. Toral es un futbolista sólido. No es el centrocampista clásico de La Masía, sino un interior zurdo que destaca por cualidades muy concretas: vertical, rápido, muy intenso, alto (1,82 m), fuerte (72 kilos), resistente y con un excelente juego aéreo. Es un perfil prácticamente inédito en Can Barça, muy similar al de Seydou Keita, pero con mayor vocación ofensiva y menor tensión defensiva. Otra virtud técnica singular es la capacidad de amortiguar balones con el pecho: le hemos visto hacerlo con un pase vertical desde 40 metros y bajarlo del pecho al pie como si se tratara de un flan.
Llegó al Barça en 2003, iniciándose en el Benjamín A que entrenaba Sergi Doménech. En ese equipo encontró al que sería su pareja de baile durante ocho temporadas: Sergi Samper, un centrocampista tocado con la varita mágica de Xavi e Iniesta. El tándem ha sido milagroso y ha catapultado a su equipo, hoy el Cadete A, a cotas similares a las de la generación del 87 (Messi, Piqué, Cesc…). A la pareja de medios la llaman Samper&Toral, Sociedad Limitada, pero el dúo se romperá en pocos meses. Uno al Emirates y el otro, al Camp Nou.
¿Por qué se va?
Por voluntad propia del chico. Jon Miquel es un joven con la cabeza muy bien amueblada que cursa 4° de ESO con notas excepcionales. Su rotundo deseo es jugar en la Premier. Contra lo que se ha dicho, ni su madre (Sheila Harper), nativa inglesa, ni el resto de su familia le han presionado, sino todo lo contrario. Ninguno de ellos quería que se fuera a Londres. Pero Jon Miquel ha insistido con terquedad insólita. Quiere jugar el campeonato inglés, que se ajusta como un guante a sus características: un híbrido entre Lampard y Keita.
Llegó al Barça en 2003, iniciándose en el Benjamín A que entrenaba Sergi Doménech. En ese equipo encontró al que sería su pareja de baile durante ocho temporadas: Sergi Samper, un centrocampista tocado con la varita mágica de Xavi e Iniesta. El tándem ha sido milagroso y ha catapultado a su equipo, hoy el Cadete A, a cotas similares a las de la generación del 87 (Messi, Piqué, Cesc…). A la pareja de medios la llaman Samper&Toral, Sociedad Limitada, pero el dúo se romperá en pocos meses. Uno al Emirates y el otro, al Camp Nou.
¿Por qué se va?
Por voluntad propia del chico. Jon Miquel es un joven con la cabeza muy bien amueblada que cursa 4° de ESO con notas excepcionales. Su rotundo deseo es jugar en la Premier. Contra lo que se ha dicho, ni su madre (Sheila Harper), nativa inglesa, ni el resto de su familia le han presionado, sino todo lo contrario. Ninguno de ellos quería que se fuera a Londres. Pero Jon Miquel ha insistido con terquedad insólita. Quiere jugar el campeonato inglés, que se ajusta como un guante a sus características: un híbrido entre Lampard y Keita.
El representante de Toral y Samper, Pere Guardiola, se reunió con ambos hace varios meses a la vista de la oferta recibida desde el Arsenal por los dos centrocampistas. Samper dijo que se quedaba; Toral, que deseaba vivir la experiencia. Ese empeño ha sido decisivo. El chico se trasladará en solitario a Londres (es perfectamente bilingüe) para seguir su carrera de futbolista, en tanto su familia permanecerá en Catalunya.
¿Qué condiciones le ofrece el Arsenal?
Un contrato profesional con salario entre 25 y 35 veces superior al que percibiría en el Barça más un sustancioso bonus ligado a su debut en el primer equipo. Estudios y alojamiento gratuitos (en uno de los apartamentos que rige la legendaria Mrs. Noren); viajes pagados para toda la familia a Londres y, lo más importante, una hoja de ruta deportiva perfectamente diseñada: en su primera semana en Londres, Toral se entrenará con el primer equipo. Después, jugará en el sub 18 y lo alternará con el equipo denominado Reserves. La programación prevé que en la temporada 2012-2013, ya con 18 años, se incorpore al primer equipo para disputar partidos menores. Esta hoja de ruta se la explicó en persona el propio Arsène Wenger.
¿Qué recibe el Barça?
La compensación que el Arsenal abonará al Barça en concepto de derechos de formación será de 500.000 euros. Desde el punto de vista económico, el Barça saca una elevada rentabilidad a la operación: en sus ocho años como canterano, Toral sólo ha costado la parte proporcional de los taxis que le trasladaban a los entrenamientos más 30 euros de dieta por partido jugado. A cambio, pierde a uno de sus jugadores más prometedores.
¿Por qué no se le puede retener?
En España no es posible firmar contratos laborales a menores de 16 años. Por tanto, cualquier menor de esa edad es susceptible de ser captado por un club inglés, que no sufre dicho hándicap. La única forma de evitar la marcha de un canterano es ofreciéndole una suma de dinero capaz de frenar la salida, pero los importes que manejan los clubs ingleses hacen inviable que el Barça pueda igualar las ofertas. El Barça maneja 250 canteranos por año y en el primer contrato laboral que se firma, a partir de los 16 años, el importe estándar es de 10.000 euros anuales, entre 25 y 35 veces menos de lo que maneja el Arsenal. En estos casos, el Barça sólo puede optar por apelar al sentimiento de club o dejar marchar al chico.
¿Por qué se queda Samper?
El pasado viernes, Sergi Samper anunció al Barça su decisión de firmar su primer contrato. Lo hizo tras escuchar el plan deportivo que el club ha diseñado para él. Por delante suyo no sólo tiene a Xavi e Iniesta, sino también a Thiago, Sergi Roberto, Rafinha, Babunski, Nando Quesada y Pol Calvet, como mínimo. Pero recibió muestras de confianza absoluta en su talento. Samper entró en el Barça con 6 años de edad y no conoce ni siente otros colores. Intimo amigo de Toral, pasó la tarde del domingo con él. El lunes, la sociedad limitada Samper&Toral pasaba a la historia.