lunes, febrero 27, 2006
El Madrid ha desaparecido y el Chelsea cambia ahora el césped de Stamford Bridge
El problema del Madrid es que ya casi no le queda nada a lo que agarrarse. Es un náufrago en el océano sin referencias a las que sujetarse. Cambió el entrenador, regresó el capitán, volvió el gran veterano, se incorporó el goleador, ficharon la esperanza italiana y el torpedo brasileño, resucitó el espíritu ancestral, se reconstruyó el miedo escénico, apretó la afición, redoblaron los entrenamientos, forzaron las máquinas mediáticas. Pero ha sido en vano: el náufrago sigue ahí, en mitad del oleaje. Y ahora mismo ya no queda apenas nadie a quien invocar, apenas nadie a quien acusar.
El Madrid había mejorado estéticamente desde que se fue Luxemburgo, pero empiezo a creer que fue un maquillaje. La goleada en La Romareda quizás llegó más al fondo del tuétano blanco de lo que creímos. Y de lo que parecía tras la ‘casi remontada’ del Bernabéu. El Madrid ya no juega regular ni mal. Ha desaparecido. El coraje de sus jugadores parece haberse esfumado, al tiempo que López Caro se enreda en operaciones sospechosas, como esa posición de Raúl Bravo como central, con Helguera arrinconado a comer pipas, Beckham al lateral derecho (el director de márketing va a sufrir un infarto como siga esta aberración) y Cicinho de ‘metomentodo’.
No ayudan los jugadores. El retorno de Zidane parece diluirse entre brumas. El de Ronaldo aún no se ha producido. El de Raúl está resultando inocuo. La recuperación de Robinho ha quedado congelada. Baptista y Cassano continúan en lista de espera. Parece un equipo sin alma, sin espíritu, sin ánimo. Sin plan A, ni plan B. Sin otro objetivo que ver pasar el tiempo. Con toda probabilidad, estas percepciones seguramente no coinciden con la realidad del vestuario, pero lo parece. Imagino al aficionado madridista profundamente irritado con su equipo, su entrenador y su presidente. Pero, sobre todo, irritado porque ya no le quedan demasiadas ilusiones ni excesivos asideros a los que sujetarse en medio del temporal. Y aunque la demagogia fácil lo centre todo en el tercer año sin títulos, el problema es mucho más profundo y serio que eso. Es un problema de fondo, no sólo de triunfos. Ya no es una cuestión coyuntural, sino estructural.
Fotos: El Mundo & AP (Madrid en Mallorca); Web Real Madrid (Ramos, Beckham y Zidane); El Mundo & Reuters (Homenaje a Zarra en Bilbao); Web Chelsea (nuevo césped en Stamford).
P.D. 1: A la vista del estado de Stamford Bridge, el Chelsea ha decidido cambiar el césped de su estadio. La decisión se adoptó el sábado por la noche y el domingo por la mañana ya se ha procedido a ello. Ya no queda ni rastro del patatal. Velocidad inaudita.
Vídeos: Los dos últimos anuncios de Messi en Argentina (creo que ni siquiera han sido emitidos). Gentileza de Jordi Basté (RAC-1):
Referencias
- Los goles del Mallorca-Madrid
- Un socio muy enfadado
- El Chelsea cambia el césped de Stamford